Con Izozaki Bilbao reúne ya 5 de los mayores premios de arquitectura. El octogenario y prolífico japonés y una de las figuras clave de la arquitectura de la última parte del siglo XX Izozaki ha conseguido recientemente el Premio Pritzker 2019, los premios nobel de la arquitectura.
Y es que pocas ciudades pueden presumir como Bilbao de contar con cinco premios Pritzker. Primeras figuras de la arquitectura que han ayudado a conseguir la metarmorfosis de Bilbao y el tan famoso ya #EfectoBilbao. El distinguido este año ha sido Isozaki a la lista de ilustres como Frank Gehry, autor del Guggenheim; Norman Foster, del Metro; la angloiraquí Zaha Hadid, responsable del Máster Plan de Zorrotzaurre, y el arquitecto Richard Rogers, que ha diseñado el rascacielos más alto de Garellano.
El arquitecto japonés se caracteriza por ser un arquitecto para arquitectos que conecta con la sociedad. Su búsqueda es la búsqueda de una arquitectura significativa. Edificios que deben responder a su lugar y momento y contribuir a nuestra cultura más allá de sus límites físicos. Isozaki dedica mucho tiempo a investigar y medita antes de dejar que sus obras hablen. Ha creado obras de gran calidad que desafían la categorización, reflejando su constante evolución y se mantienen contemporáneas en su enfoque. Cuenta con un centenar de obras que se reparten por Asia, América, Europa y Australia.
En Bilbao ha dejado su impronta con sus dos torres gemelas de 82 metros y veinte plantas, que se levantan en Uribitarte. Ideó un conjunto arquitectónico marcado por la diversidad, en el antiguo depósito franco. Diversidad de materiales, ya que los siete edificios que integran el conjunto arquitectónico combinan la piedra, el ladrillo y el cristal, y diversidad de usos, porque albergan 280 viviendas, además de oficinas y comercios.
¡Enhorabuena Bilbao!
